Sin duda, el bacalhau es el pescado rey en la gastronomía portuguesa, que se consume en grandes cantidades. Los cocineros portugueses afirman que existen 365 recetas diferentes para el bacalao, una para cada día del año. Algunas de las recetas más conocidas son: bacalhau à brás, bacalhau à Gomes de Sá, bacalao guisado, pastéis de bacalhau o en forma de pataniscas, en buñuelos muchas veces acompañadas de arroces caldosos o una feijoada, plato típico de la cocina brasileña a base de alubias pintas y carne de cerdo.


Otros postres populares son los dulces de naranja de Setúbal, las quesadas de Sintra, los pasteles de huevo de Alentejo, los huevos moles de Aveiro, las piñonadas de Alcáce, el arroz con leche, la crema quemada o los flanes.
Todas estas especialidades gastronómicas se pueden regar con los excelentes vinos portugueses, que explican la gran tradición vinícola del país. Además de las distintas variedades de los famosos y exquisitos vinos dulces de Oporto y Madeira (con sus cuatro variedades principales: sercial, verdelho, bual y malvasía), Portugal dispone de magníficos viñedos y bodegas que ofrecen una amplia variedad de vinos de mesa de excepcional calidad. Son célebres los vinos blancos y tintos del Duero, del Alentejo y del Dão, los vinos verdes del Miño, el moscatel de Setúbal o los tintos de Terras do Sado y el Algarve.
En está sección también podrán encontrar algunas de las recetas más representativas de la gastronomía portuguesa:
